Diplomado para jóvenes profesores
Por: Yasnier Hinojosa
En cuanto a lo monetario, no se trata de las profesiones más remuneradas. Los que se quedaron lo saben y también conocen el sacrificio y la nobleza que hay que tener. Al inicio, no todos tenían la vocación. Sin embargo, cuando se cuela el “bichito”, muchos se sienten atrapados.
Quizás fue el ejemplo de sus maestros lo que los hizo quedarse. O tal vez fue el momento en que levantaron la mano y asintieron con la cabeza cuando, en segundo o tercer año de la carrera, les propusieron ser alumnos ayudantes; habrá que investigar.
Pudieron haber sido periodistas, intérpretes de lengua extranjeras o dirigir una empresa… quién sabe, porque les sobraban capacidades. No obstante, los que se quedaron han decidido seguir dando clases en la universidad.
Los miro mientras se preparan en el Diplomado para jóvenes profesores y sé que mañana, los que se quedaron y que mañana serán el relevo, no tendrán el bolsillo cargado de peculio. Sin embargo, cada jornada que pasen educando, llevarán a su casa montones de fajos de amor y sueños.
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