Un Sueño Colectivo: Las Pruebas de Ingreso a la Educación Superior en Cuba

Los días 6, 9 y 13 van siendo jornadas significativas en la vida de miles de jóvenes cubanos: las pruebas de ingreso a la educación superior. Este proceso, diseñado con transparencia y rigurosidad, ordena el acceso a más de 100 000 plazas disponibles, y refleja el compromiso de un país con el futuro de sus nuevas generaciones.

El examen, es un instrumento para garantizar la equidad en el otorgamiento de las carreras, pero mientras los estudiantes se esfuerzan por alcanzar sus metas, un equipo silencioso trabaja incansablemente.

En ese equipo están los centenares de trabajadores universitarios, los veo, pese a desafíos que imponen estos tiempos, madrugan, se desvelan revisan procedimientos y logística para que todo salga bien.

Aún, en medio de dificultades, hay gestos que inspiran: la alegría de quienes van aplicar los exámenes.

Este proceso demuestra que la educación superior en Cuba no es un privilegio, sino un derecho construido con el sudor y la pasión de muchos.

Para los jóvenes, es el primer paso hacia su realización profesional; para la nación, una apuesta por un futuro de hombres integrales, para la universidad otra tarea.